domingo, agosto 20, 2006

Excepto cuando hace frío

¿Alguna vez han sentido estar en un lugar, pero con la mente y el corazón en otra parte muy lejana??..., sí, me imagino que sí, que todos alguna vez nos hemos sentido así... Bueno, así ha sido mi vida últimamente, con mi corazón y mi mente muy lejos de donde está mi cuerpo, pero estos últimos días además..., con más ausencia en el aquí y ahora, con más nostalgia y cierta desconexión también.

48 horas sin lágrimas..., eso es un trinfo... De a poco, paso a paso siento ir avanzando, aunque dolor aún queda mucho y mi alma y mi cuerpo reclaman por él, pero de a poco avanzamos...

Como un amigo me dijo: "Las cicatrices no sanan ni se olvidan..., eventualmente sólo dejan de doler.... excepto cuando hace frío"

:'(

Soltaire

6 Comments:

Blogger Isthar said...

Cuando las cosas nos pesan, cuando los sentimientos son confusos y las emociones nos tienen en un tira y afloja, el cuerpo y la mente parecen desconectarse. Sí, en muchas ocasiones me he sentido como describes, dividida.

Yo sí creo que las cicatrices sanan, pero no olvidan, y por eso duelen cuando vuelve el frío, porque los latidos se notan más allí donde algo nos hirió...

Un abrazo muy fuerte

10:58 a. m.  
Blogger Soltaire said...

Qué bueno saber que para alguien las cicatrices sí sanan..., es más esperanzador... :)

Gracias por tu abrazo, ayuda.

Un beso
Soltaire

11:35 a. m.  
Blogger El Tipo de la Brocha said...

Conectemos ahora con nuestro corresponsal en Perspectiva Más Pesimista:

Las cicatrices son el perpetuo recuerdo de aquello en lo que fracasamos. Borrarlas sólo provocará que tropecemos de nuevo.

11:49 a. m.  
Blogger Soltaire said...

yaaaa, buen punto "el tipo de la brocha", pero aunque tengamos ese recuerdo permanente, horrible y doloroso..., acaso ¿no es el ser humano el único animal que tropieza denuevo con la misma piedra??..., o sea como advertencia para prevenir no sirve mucho la cosa... :(

Un beso,
Soltaire

11:57 a. m.  
Blogger Eulalia said...

Nosotros estamos hechos de cicatrices,de amores, de esperas vanas, de logros, de fracasos...
¿cómo se convierte una herida en parte de tí?
No tengo ni idea, pero termina por ocurrir, y entonces tú y tu cabeza se encuentran.
Un beso.

5:04 p. m.  
Blogger Soltaire said...

Sí Eulalia, supongo que la magia está en aprender de esas heridas y que con la perspectiva del tiempo las valoremos tanto como las alegrías vividas..., al fin y al cabo... somos lo que somos gracias a la integración de todo eso
:)

Un beso
Soltaire

9:25 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home